La Música de Frozen

En una entrevista con The Telegraph, Andrew Lloyd Webber, uno de los compositores de teatro musical más importantes, comentó que la gran falla de los musicales de la última década fue la falta de "muy buenas canciones". Hace algunos días, el CEO de The Walt Disney Company, Bob Iger, reveló que la empresa tiene planes de llevar a Broadway una adaptación de su última cinta animada, Frozen. ¿Se cumplirá con esto el deseo de Sir Andrew de tener un musical nuevo con muy buenas canciones?



Frozen, la nueva aventura helada de Disney, ha tenido un éxito enorme en taquilla, superando a clásicos como La Bella y la Bestia y Aladdin. La historia de la Reina del Hielo ha cautivado a las audiencias, gracias a sus extraordinarios efectos visuales y a la simpatía de sus personajes. Sin embargo, el complemento que termina de hacer mágica la experiencia de esta película es la música.

Frozen trata, a grandes rasgos, de que Elsa, una joven reina, que tiene el poder mágico de congelar lo que toca, escapa de su palacio, dejando todo a su alrededor sumido en el más crudo de los inviernos. Para regresar el verano al reino de Arendalle, su hermana, la princesa Anna, decide ir a buscarla para convencerla de volver. Todo esto va acompañado de una banda sonora preciosa y excelentes canciones, que pronto se convertirán en clásicos de Disney.

Desde el segundo en que empieza Frozen, la música, de Christophe Beck, engancha al espectador y lo sitúa en el helado entorno de los países nórdicos. La pieza coral que abre la película es, solamente, el preámbulo para una historia complementada con canciones, que van más allá de tonadas pegajosas. Son intervenciones musicales que abren una ventana al alma y a la mente de los personajes.

El compositor de irreverentes musicales de Broadway, como Avenue Q y The Book of Mormon, Robert López y su esposa, Kristen Anderson-López, fueron los encargados de escribir las canciones de este largometraje animado. Ellos demuestran que pueden aprovechar su ingenio cómico para realizar, también, temas conmovedores y emocionantes.  Con una gran gama de estilos, que va desde temas totalmente pop, como "Love is an open door", hasta canciones orquestadas y dramáticas, muy la estilo Disney, como "For the first time in forever", los motivos de cada parte musical son inolvidables y las letras son tremendamente ocurrentes.

Parte de lo que hace extraordinario el trabajo con las canciones de Frozen es el hecho de que los compositores juegan con nuestros sentimientos en buena parte de ellas. Un ejemplo es el tema "Do you want to build a snowman?", que tiene una melodía alegre y juguetona, pero que ilustra una situación terriblemente triste.

De todo el soundtrack, la canción que sobresale es, la nominada al Oscar, "Let it Go", interpretada por la estrella de Broadway, Idina Menzel, que hace la voz de la reina Elsa. Este precioso tema es otro recorrido de emociones, que va de la desolación a la furia y, de ahí, a la liberación. Con una letra muy reflexiva y momentos musicales que enchinan la piel, esta canción funciona por sí sola y, aún así, representa un momento indispensable para el desarrollo de la protagonista. La secuencia en la que la niña seria y recatada se transforma en la Reina de las Nieves, mientras hace figuras de hielo, seguro pasará a ser uno de esos momentos clásicos de la historia de las películas de Disney.

Hace pocos días, Disney publicó esta versión de "Let it Go" en 25 idiomas. Es genial cómo parece que todo fuera interpretado por una misma cantante. En el minuto 3:14 suena la canción en noruego, idioma que se habla en el reino ficticio de Arendelle.

La banda sonora de Frozen también tiene momentos cómicos, que tienen más profundidad de la que aparentan. Hay que ponerle mucha atención a letras como la de "In Summer" o "Fixer Upper", para poder apreciar los ocurrentes juegos de palabras y detalles picantes que aparecen ocultos en ellas.

 

Además de lo brillante de la música, las interpretaciones de los artistas de doblaje son particularmente expresivas. En la banda sonora en inglés, sorprende Kristen Bell, conocida por salir en comedias, como Forgetting Sarah Marshall, en la voz de la princesa Anna. Aunque su voz es muy típica de princesa de Disney, tiene un timbre muy agradable y le da una personalidad muy especial a su personaje. Por otro lado, hay poco que decir de Idina Menzel. Desde sus participaciones en Rent y Wicked, sus golpes de voz maravillan a cualquiera y en Frozen no queda a deber.

Es temporada de premiaciones. Vale la pena ver la cinta ganadora del Golden Globe a mejor película animada y disfrutar su magnífica banda sonora. Verla en español no arruina la experiencia. El control de calidad de Disney es inigualable. La traducción y los doblajes son estupendos. 

¿Ya vieron Frozen? ¿Qué opinan de las canciones y su banda sonora? Comenten y compartan.

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